Te suena: haces cosas, pero no ves resultados. ¿Por qué?
Publicas en redes, haces alguna campaña, mandas unos emails… Pruebas cosas que ves por ahí. A veces funciona algo. Otras veces no.
Y tú te preguntas: “¿Qué estoy haciendo mal con mi marketing?”
Spoiler: no es solo lo que haces, sino cómo lo haces.
Y muchas veces, ni siquiera hay un “cómo”.
La mayoría de pequeños negocios y profesionales autónomos no tienen un plan de marketing. Hacen cosas “según va saliendo”. Improvisan. Tiran de intuición. Siguen lo que ven que hacen otros. Y ahí está el problema. Hoy quiero hablarte de eso: de por qué tu marketing no está funcionando… porque no tiene estructura, ni dirección, ni estrategia. Y qué puedes hacer para empezar a cambiarlo.
1. Hacer sin pensar: el primer error
Si tu estrategia se basa en “voy a publicar algo en Instagram hoy porque toca”… ya empezamos mal. Hacer sin tener claro: a quién hablas, por qué estás usando ese canal, qué objetivo buscas con esa acción, cómo vas a medir si ha funcionado… …es como correr una maratón sin saber dónde está la meta. Te cansas, claro. Pero no avanzas.
2. Improvisar tiene un precio
Muchos negocios funcionan así:
- Mes uno: redes sociales.
- Mes dos: publicidad.
- Mes tres: “mejor hago una web nueva”.
- Mes cuatro: “voy a probar con TikTok, que ahora está de moda”.
¿Resultado? Nada consistente. Nada que puedas medir. Nada que te construya marca ni ventas reales. Y el tiempo (que ya sabes que vale oro) se te va en pruebas que no llevan a nada. La improvisación es el enemigo silencioso del crecimiento. Suena libre, suena creativo… pero en realidad, te mantiene atrapado/a en el mismo sitio.
3. No es culpa tuya: nadie te enseñó a planificar.
La mayoría de los pequeños negocios no planifican su marketing no porque no quieran, sino porque nadie les ha enseñado cómo hacerlo bien. Crees que «plan de marketing» es algo enorme, complicado, que requiere mucha inversión y que es sólo para grandes empresas… Y no…
Un buen plan de marketing:
- Te aporta el foco que necesitas (es decir, qué necesitas hacer y por qué)
- Te ahorra tiempo, ya que evitas acciones inútiles.
- Te da paz mental, porque sabes y sientes que hay una dirección, un propósito
- Te ayuda a crecer con sentido.
Pero, claro… Alguien tiene que enseñarte cómo hacerlo de una forma simple, accionable y, sobre todo, adaptada a la realidad de tu negocio.
Eso es exactamente lo que hago en mi curso. Pero ya hablaremos de eso.
4. El problema no es la IA: es cómo la estás usando
Este punto es importante. Muchos ahora intentan usar inteligencia artificial como salvavidas: le piden a ChatGPT ideas de contenido, usan Canva para montar un post rápido, automatizan 4 cosas en Metricool…
Y eso está bien. Pero si lo hacemos sin una estrategia detrás, sin una visión clara, la Inteligencia Artificial sólo te está ayudando a hacer más rápido algo que ya no estaba funcionando.
5. Sin planificación, no hay marca ni ventas
Si tu marca cambia de tono cada semana, si no queda claro qué ofreces, si no estás construyendo una relación con tu comunidad… Es muy difícil vender, por no decir imposible.
La falta de planificación hace que tu marca pase desapercibida. Puedes tener el mejor producto, ser el mejor profesional del mundo… pero si no sabes comunicarlo bien, no sirve de nada.
Entonces, ¿qué hago?
Lo primero: no te culpes. Este caos silencioso lo viven casi todos los pequeños negocios. Lo importante es salir de ese piloto automático.
¿Y cómo?
Pues con un plan sencillo y práctico. Que no te abrume, sino que te libere.
Por eso he creado el curso «Plan de marketing con Inteligencia Artificial». Con este curso aprenderás paso a paso:
- Cómo construir tu estrategia desde cero.
- Cómo elegir bien tus canales.
- Cómo usar la IA de una forma útil.
- Cómo crear un sistema que funcione para ti.
Todo explicado de una forma clara y enfocada a pequeños negocios o personas que trabajan por su cuenta, en un curso online que podrás hacer a tu ritmo y con un montón de recursos de interés.
¡RECUERDA!
Si tu marketing no está funcionando, no es porque no valgas o no hagas suficiente… es porque nadie te ha enseñado a planificar. ¡Y eso se puede cambiar!